sábado, 15 de enero de 2011

La"salamandra rabilarga", la "zarigüella bizca", el "ratonero moro", el "caracol manzana" y demás bichejos.

Al adentrarme ayer en una cadena televisiva de esas a las que no soy afín, confirmé éso, o sea, que es imposible sentirse afín a ella. Y no es que me hubiese dado una pájara y me hubiera puesto a ver alguna atrocidad tipo "Gran Hermano" o similares, ¡que va!; sólo vi el informativo de las 3.00. Partiendo de la base de que a mí el que me gustaba era el telediario, ya desaparecido, de Lorenzo Milá en La 2 y que ahora, en su defecto, ando abonada al de la Primera, es comprensible que el ver el de esta cadena haya sido como un impacto. Pero un impacto de los súbitos. Y es que parece increíble que una cosa aparentemente tan objetiva y cuadriculada como un informativo pueda hacerse de una manera tan diferente, pasando de correctos y serios a sensacionalistas y marrulleros.
En fin... a lo que voy. El caso es que entre todas las noticias que me ofrecieron (de una manera destartalada y molesta) me hizo gracia lo de la "salamandra rabilarga" y lo de la "zarigüella bizca". Y me hizo gracia no por el chiste, sino por la falta de seriedad que aprecié en el hecho de que entre noticias tipo "prohibido fumar", "inundaciones en Australia" o "muertos en las revueltas de Túnez ", metieran estas payasadas más propias de la factoría Disney que de un informativo recto. Porque digo yo ¿no esta el mundo suficientemente enmarañado como para andar perdiendo el tiempo hablando de esos peculiares bichejos? Es verdad que, cuanto menos, es peculiar que la salamandra de marras, la "chioglossa lusitanica", por ser una especie rarísima en España haya conseguido con su presencia lo que no consiguieron en meses de protestas los vecinos de los "ayuntamientos pontevedreses de Pontecaldelas y A Lama", o sea, "paralizar las obras de una carretera que dividía a la zona en dos" estropeando sus bellos parajes y su  variado ecosistema... Y en cuanto a lo de la zarigüella bizca, ¡que quieren que les diga!, el bichillo tenía su gracia con su bizquera pero no daba ni para un comentario, la verdad.
Ya antaño quise escribir sobre cuáles serían los criterios, en un consejo, a la hora de escoger las noticias que publicarían en la prensa del día siguiente (hoy extensible también a los informativos) Al final se me quedó en el tintero como tantos otros temas, pero guardé los recortes que me llevaron a reflexionar sobre ello. Y es que, por aquel entonces, en días consecutivos, me topé con la paradoja de que en una misma página ponían en grandes titulares que "el ratonero moro (un ave rapaz africana), volvía a anidar en el campo andaluz" y junto a esta noticia se leía en pequeñito titulares tipo "la policía halla en una bolsa el cadáver de un recién nacido", o "muere el joven que había ingerido 252 bellotas de hachís", o "fallece un trabajador atropellado por el camión que reparaba"... Verídico; la misma página, la primera noticia en mayor formato y las tres siguientes en pequeño. Así, en días sucesivos me encontré con titulares a página completa tipo: "Un juez investiga la muerte de dos crías de águila imperial", "Cataluña secará la mitad del delta del Ebro para combatir una plaga del 'caracol manzana' que ha colonizado el margen izquierdo del humedal" o el de: "Doñana duplica la reproducción de aves acuáticas en dos años"... Y ya como colofón, un artículo a 3/4 partes de página que decía: "Los animales sí que saben. Existen lagartijas que son capaces de reconocer a sus familiares más directos por el olfato" y en el otro 1/4 de la misma página: "El derrumbe de una montaña sepulta 300 viviendas en México. Más de 1000 personas podrían estar bajo tierra y lodo en el estado de Oaxaca"...
En fin... desolador, desconcertante. Como decía una gallega de esas rurales, sabias y curtidas del municipio pontevedrés de Pontecaldelas, cuándo el reportero le preguntó sobre la "salamandra rabilarga" esa que había impedido milagrosamente lo de la carretera: " Es que no hay nada como el que aparezca un animal de esos raros para que vengan los ecologistas, lo paralicen todo y nos solucionen el problema. Si veo alguna, habrá que cogerla y guardarla por si en un futuro la necesitamos para algo" (más o menos, no es textual) Sabias palabras, pero con un trasfondo terrible. Y es que se ve que el mundo animal vende; evidentemente mucho más que el humano. A la vista está.
Así nos van las cosas.

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