sábado, 17 de abril de 2010

Cosas de la ¿¿¿Seguridad??? Social

"Fue a sacarse una muela y perdió un ojo"; "un joven acudió a Urgencias del Virgen Macarena por un flemón y, tras recibir tratamiento, perdió la visión". ¡Que barbaridad, pobrecillo! Y yo, ingenua de mi, creyendo que estaba recibiendo la peor de las Asistencias Sanitarias en mis propias carnes, y resulta que debería de andar dando las gracias, a quien proceda, en vista de lo leído. Claro que a este pobre hombre le hicieron la puñeta en la Asistencia Pública; la mía es Privada.
El Martes13 pasado (día chungo, lo sé, pero fue el que me dieron y cuando, supersticiosa yo, protesté me dijeron que si no iba ese día, ya no había hueco hasta mayo) me fuí a una revisión rutinaria:
Pregunta del insigne galeno: "Bueno, que tal, dígame, ¿que le pasa?"
Respuesta de una servidora: "Nada"
Pregunta: "¿¿¿???"
Respuesta: "Es que cuando pedí la cita el 2 de febrero sí que me pasaba, pero ya me he curado. Así que vengo a que mande una analítica general por si se me ha quedado alguna secuela."
Ni que decir tiene, que al tío ni se le mudó la cara, no sé si por falta de vergüenza o por andar ya curado de espanto.... Se vé que, el dejarte esperando dos meses para que te vean, es el protocolo de mi Seguro Privado, pero imagino que, en el contrato, estaría especificado con letra tan piojo, que no me habré enterado. Y es que todos funcionan igual, porque mira la tiarrona de mi ginecóloga que te da, igualmente, cita a dos meses vista, tanto si vas a una revisión rutinaria, como si estas comidita de ladillas. ¿Y el dermatólogo?, para que me revise la piel despues del verano tengo que pedirle la cita en mayo...Y no hablemos de mi famoso traumatólogo, que le pedí hora en marzo y no me atendió hasta el 21 de julio. Eso sí, mientras tanto una doctora a su cargo me estuvo dando 15 sesiones de rehabilitación en mayo, por eso de ir adelantando. A la décima sesión, yo que había empezado con un hormigueo en una mano, estaba que ya no sentía ninguna de las dos. Cuándo en julio, la eminencia me atendió, me reconoció que su equipo me había estado lesionando con lo que me habían estado haciendo. Cómo yo ya, desesperada, había ido para entonces a una fisio y estaba bastante bien, el tío me recomendó que me cuidara y que, puesto que se aproximaba mi mes de veraneo, cuándo me paseara en yate y me viera en alta mar, frenara la tentación de sumergirme de cabeza en él y bajara por la escalerilla... Véridico, ¡sera capullo!
Pero vaya, nada es comparable con lo de este pobre desgraciado que más le valdría haberse sacado la muela con unas tenazas en su casa, antes de ponerse en manos de estos desalmados. El infeliz se fue al Hospital con su problema y tras ponerle un tratamiento para bajar el flemón lo largaron; seis días después volvió a Urgencias "por el dolor y los problemas de visión que sufría" y le dijeron que lo que tenía era "un problema psicológico" o sea, que era todo producto de su invención y volvieron a largarlo de vuelta a casa, eso sí, con una carga de ansiolíticos en el bolsillo. Ahora, 18 meses después , la criatura está ciega del ojo izquierdo, tiene deformado todo ese lado de la cara, no pudiendo, incluso, ni abrir la boca y tiene "horrendas cicatrices en el cuello y la garganta"... Pero no se escandalicen tanto, porque el generoso "SAS  ha indemnizado al joven sevillano con 49.452e". Para que vean lo buenos que son. Ya me hubiera gustado que el dinero ese,  no hubiera salido de las arcas que tú y yo llenamos, sino del bolsillo del medicucho canalla que lo atendió. Con seguridad que ni lo habrán expedientado y que seguirá, tan pancho, ejerciendo y recetando.
Son cosas de nuestra ¿¿¿Seguridad??? Social que funciona, como tantas otras cosas en este país, como un tren descarrilado.

1 comentario:

  1. Si es que... cuando yo digo que a mí no me gusta ir al medico es por algo...

    angarok (no me deja firmar el comentario arriba...)

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